PASO A PASO SE HACE EL CAMINO.

Coke: Hola tío ¿cómo vas?

Jan: Bien aquí empollando un poco….

Coke: Tengo 4 días libres….te propongo un plan….

Jan: Miedo me das, cuéntame.

Coke: Sarria- Santiago- 113km… corriendo ¿te apuntas?

Jan: No me lo digas dos veces, dime sitio y hora.

Así resumo el comienzo de nuestro viaje express….

Después de preparar más o menos todo y pendientes las 24 horas del día a las noticias (no ponían nada fácil nuestro viaje debido al temporal de frío y nieve) que por estas fechas azotaba toda la península, decidimos que era una aventura preciosa y que si nos teníamos que volver a Madrid no sería un fracaso si no una nueva experiencia....

Así pues, tras mucho hablar por teléfono, nos encontramos los dos en la Estación Sur dispuestos a coger el autobús de las 00.30 dirección Piedrafrita de O´ Cebrerio.

5:00 a.m.: tras intentar descansar un poco llegamos hasta el lugar donde queríamos empezar nuestro camino ( Piedrafita ) pero debido al temporal, el conductor se niega a dejarnos en esa zona por motivos meteorológicos y tuvimos que empezar a pensar en un plan alternativo.
Tras unos minutos de angustia y con toda la gente del bus mirándonos, decidimos cambiar de ruta y seguir hasta Lugo y una vez allí ya veríamos si teníamos la suerte de enlazar con algún tramo del camino.
No somos muy creyentes ni religiosos pero desde ese momento nuestro Apóstol y amigo Santiago nos iba a cuidar muy pero que muy bien ( Gracias ), ya que tras el mal trago pasado por no partir desde Piedrafita, pudimos encontrar un enlace ( Lugo-Sarria) que salía 1 hora más tarde de nuestra llegada.

Comenzamos a desayunar en la estación de Lugo mientras que escuchábamos que a lo mejor el autobús que teníamos que coger de nuevo podría no salir debido de nuevo al temporal ….volvimos a la angustia pero de nuevo y como ya dije antes, nuestro amigo Santiago se volvió a poner de nuestra parte y partimos ya por fin hasta Sarria!

1ª Etapa: ( Sarria - Palas del rey 47km ) Tras cambiarnos y ponernos las mallas y zapatillas de faena, comenzamos a seguir las ya conocidas flechas amarillas ( para los que no sepáis, están pintadas a lo largo de todo el camino y te indican por donde se llega a Santiago ). Empezamos a pasar kilómetros y nos empezó a entrar un agobio debido a que no encontrábamos ningún sitio para sellar la credencial ( librito donde vas poniendo los sellos que indica los sitios por donde vas pasando ). Iba a ser nuestro primer sello , pero no encontrábamos lugar para poder hacerlo y cada vez nos acercábamos más a la distancia de 100km para Santiago ( para que te den en Santiago la Compostelana tienes que indicar que como mínimo has hecho 100km andando o 200km en bici ) y cuando quedaban unos 4 o 5 kms mas o menos para llegar a la frontera de los 100 kms, volvió la figura de Santiago a aparecer en forma de casita baja donde sellaban las más que deseadas credenciales ( Gracias ).
Tras estos momentos de tensión por el sello, empezamos a correr disfrutando del camino nevado, con copos cayendo y estampas al más puro estilo de película de navidad. Era una sensación espectacular , difícil de explicar....estar por esos parajes , esas vistas, los ríos que bajaban con fuerza, las montañas nevadas que nos hacían parecer más pequeños….Pero el paso de los kms y que los pies se empezaban a congelar, nos bajaron de la nube y empezamos a notar la dureza del camino.

El sol se puso de nuestra parte, la temperatura, aunque no pasaba de los -2º, para correr era idónea. Así que entre charcos y mucho mucho barro, seguimos nuestro camino dirección Santiago.

La idea era hacernos unos 42kms, no íbamos con prisa y teníamos todo el día para hacerlo, pero bien es cierto que cuanto antes llegáramos, antes descansaríamos y con 3 días más por delante para correr.....el tiempo para nosotros era oro.

Aproximadamente en el km 17 hicimos nuestra primera parada. Allí empezamos a notar el cansancio acumulado, no solo por correr y por llevar la mochila a la espalda, sino también, por todo el viaje de madrugada en el autobús. Tras unos refrigerios, unas barritas energéticas y por supuesto el sello en nuestra credencial, volvimos a partir, esta vez con más dificultad, ya que con el frio, y los kms acumulados, los dolores y molestias empezaban a aparecer, pero los dos sabíamos que esto no iba a ser fácil, así que apretamos los dientes y paso a paso seguimos nuestro camino.

Las horas pasaban y las caras de felicidad seguían estando pero ya con más rasgos de sufrimiento; las mochilas parecían que pesaban el doble que al principio y todavía nos quedaban unos 15kms hasta llegar a nuestro destino ( Palas del rey ). El camino que nos faltaba por recorrer no iba a ser fácil, las cuestas se nos hacían interminables y las bajadas nos reventaban las rodillas pero el final de la primera etapa tocaba a su fin y tras 47 kms los últimos más de sufrimiento que de placer, La primera etapa llego a su fin y ahora tocaba descansar y disfrutar de una buena comilona.

``Si no fuera duro todo el mundo lo haría.Es la dureza lo que te hace grande´´